FOTOPROTECCIÓN
El sol nos aporta múltiples efectos beneficiosos: antidepresivos, antirraquíticos ( favorece la absorción de calcio en los huesos) y calóricos. Sin embargo una excesiva exposición al sol sin protección tiene efectos perjudiciales, sobre todo en la piel, como son quemaduras, manchas, deshidratación, envejecimiento cutáneo y cáncer de piel.
La piel posee mecanismos de defensa frente a la agresión solar, pero éstos son insuficientes en caso de exposición intensa, por lo que es necesario recurrir al uso de fotoprotectores.
Consejos para protegernos del sol:
Aplicar el fotoprotector 30 min antes de la exposición solar. Sobre la piel bien seca y en cantidad generosa.
Evitar tomar el sol o aumentar la protección entre las 12 de la mañana y las 4 de la tarde .
Recordar que el agua la nieve y la arena reflejan los rayos solares, aumentando sus efectos sobre la piel. Pueden producirse quemaduras incluso a la sombra.Se deben extremar las precauciones en las partes del cuerpo más sensibles al sol: cara, cuello, calva, escote, orejas y empeines.
Utilizar el fotoprotector incluso en los días nublados, aunque la piel esté morena .
Aplicar el fotoprotector cada 2 horas, o siempre después del baño o excesiva sudoración.
Se recomienda utilizar el fotoprotector durante todo el año.
La nieve aumenta de forma importante la radiación solar.
Fuente: Mediestetic