Vestida, peinada y maquillada a la última pero ¿y las uñas? Si no están pintadas con colores inauditos, con las manicuras francesas o personalizadas con un algún decorado exclusivo algo falla en ese look.
La proliferación de centros específicos dedicados a realizar manicuras y pedicuras con innovadoras técnicas, demuestra el gran protagonismo que tienen las uñas.
Cada vez más se puede observar como las más atrevidas las llevan con imitación de pieles de animales salvajes, flores o con brillantes incrustados.
El tunning no solo se hace con los automóviles, esta personalísima forma de distinguirse del resto de los mortales también ha llegado a las uñas.
¿Y qué es lo que quieren las mujeres?
Según las profesionales dedicadas a estos menesteres, sus clientas desean llevar unas manos muy cuidadas, con las uñas bien recortadas y limadas, con un esmalte de larga duración, que las favorezca y las haga destacar y sobre todo, que no les impidan realizar las tareas habituales.
Ya sea por genética o por cualquier otra causa, es difícil poseer unas uñas naturales con buena presencia, ahora gracias a las postizas, tan naturales y duraderas cualquiera las puede lucir y también tienen la capacidad de conseguir que las que tienen el vicio de comérselas consigan superar la adicción.
En este caso son muchos los hombres que también recuperen a esta terapia y también adolescentes de ambos sexos.
Nuevas tendencias
De auténticas artistas pueden considerarse las manicuristas actuales que manejan los pinceles como si fueran pintoras para realizar cuadros en cada una de las uñas.
Estas especialistas utilizan diversas técnicas para la decoración de uñas o tunning.
Según nos comentan en el centro Belleza & Bienestar las manicuristas: “La forma tradicional consiste en realizar diseños a mano alzada de inspiración propia o definidos por modelos predeterminados pero siempre buscando la originalidad, que ninguna clienta lleve el mismo motivo”.
Es muy frecuente que se solicite tan solo decorar el dedo meñique o el anular de ambas manos.
También hay otros medios para decorar, como el aerógrafo, en el que cada equipo viene con aproximadamente mil moldes que facilitan el trabajo creativo.
Aunque se utilizan los mismos esmaltes comunes, estos se mezclan con una sustancia especial que los vuelve más líquidos y manipulables dentro del aparato. De esta forma pueden hacerse estampados florales, geométricos o cualquier otro capricho que se le pueda ocurrir.
Francesa
Y para las que quieran algo más sobrio, nada como optar por la elegancia de la manicura francesa.
Esta versión consiste en llevar la uña esmaltada en un tono rosado, beige, lila o blanco y el borde exterior de la uña en un tono extra blanco.
Para hacerlas en casa se venden kits específicos con plantillas adhesivas para que incluso las que no tienen pulso puedan bordear el filo de la uña sin miedo a pasarse de la raya.
¿Uñas postizas?
Después de una pedicura a fondo y si las uñas naturales no lo permiten, se aplican unas postizas.
En este caso los esmaltados que hacen furor son los bicolores imitando la manicura francesa; pero mucho más atrevida. Es decir la uña en naranja flúor y su borde en un naranja pastel o la uña en burdeos oscuro y su borde en beis e incluso la uña en rojo vivo con el borde en blanco nuclear.
Los tipos
La cuestión es que para mostrar las uñas decoradas estas ha de ser perfectas y es cuando, en la mayoría de los casos, hay que recurrir a las artificiales, en donde también se puede elegir.
Básicamente las uñas artificiales se dividen en dos grandes grupos: las de gel o lino y las de acrílico o porcelana.
En el primer caso su inconveniente es el de que su diseño tiene el tamaño y la forma predeterminada y hay uñas que no las admiten al no poder adaptarse por completo a su forma natural de crecimiento.
Es importante saber que las uñas artificiales necesitan mantenimiento quincenal
La duración es de aproximadamente 6 meses. Estas uñas tienen una vida de 6 meses, siempre y cuando se realice dos veces por mes el mantenimiento en el salón, lo que también permitirá mantener una higiene perfecta.
Aplicación
Las que son de gel se realizan mediante capas de este material que a continuación se liman y pulen. En el caso de las de lino son capas de esta tela que luego se endurece y después se liman y pulen.
En cuanto a las de acrílico o porcelana, son las más utilizadas porque permiten la adaptación perfecta sobre la uña y se ven completamente naturales.
La aplicación consiste en un molde de uña en donde se dan capas de pasta acrílica hasta que se le va dando la forma que deseada. Igualmente se pulen y se liman.
Las que no quieran pintárselas con frecuencia pueden inclinarse por elegir las coloreadas del tono que ellas quieran..
Fuente: mujer.terra.es